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30 may 2022
Apropellets celebró el pasado viernes 27 de mayo en Pedrosa de Duero (Burgos) una asamblea extraordinaria, donde los principales productores de pellets de madera confrontaron la evolución de la temporada 2021-2022, ya finalizada; y los retos a los que se enfrentan de cara a la próxima temporada.
Para esta asamblea, se analizó, por primera vez, el mercado español durante la temporada de calefacción 2021-2022, frente a por años naturales como se viene haciendo habitualmente, según informa la asociación en un comunicado. La producción nacional entre octubre de 2021 y abril de 2022 se estima que se situó entre las 420.000 y las 480.000 toneladas.
El continuo aumento de los costes de producción ha sido uno de los principales problemas a los que se está enfrentando el sector y uno de los retos para la próxima temporada. El coste del suministro eléctrico supone ya el 19% de los costes totales de fabricación, solo por detrás del coste de la materia prima.
A pesar de este aumento, el pellet de madera -informa Apropellets- mantiene e incluso aumentan la competitividad frente a sus competidores. Los precios en su punto más alto, al final de la temporada se han situado entre 0,06-0,066 €/kWh; un crecimiento de entre el 5%-9% en función del formato de venta.
Durante esta última temporada 2021-2022, quienes han decidido apostar por los equipos y sistemas de pellets de madera, han podido disfrutar de ahorros entre el 30%-60% frente a otras tecnologías de climatización.
El análisis en detalle de la temporada:
• Crecimiento de la producción esta temporada con respecto a las anteriores, con una clara recuperación y superando la situación previa a la pandemia.
• Eliminación del sobrestock que se venía arrastrando durante las últimas temporadas.
• Crecimiento de las exportaciones, y saldo neto positivo del mercado exterior.
• Incremento del parque de estufas y calderas.
• Haber cubierto la demanda nacional sin tensiones ni roturas de stocks.
Situación en España La materia prima también ha sufrido un incremento en sus costes, debido a los problemas a lo largo de toda la cadena logística y de valor de la industria forestal y maderera desde la pandemia, con una falta de apoyo clara por parte de las administraciones públicas, que no establecen las vías adecuadas para movilizar la madera necesaria.
España, frente a lo que está sucediendo en países como Francia, Alemania, Austria, países nórdicos y bálticos, etc. está desaprovechando el enorme valor, y los múltiples beneficios ecosistémicos asociados que supone apostar por el crecimiento de la industria forestal y maderera bajo los criterios de gestión sostenible que ya se vienen aplicando en España y Europa desde hace décadas.
En España, las administraciones públicas tienen en su mano llevar a cabo la toma de decisiones y actuaciones que faciliten el acceso y valorización de la ingente cantidad de materia prima disponibles en los bosques; y que de otra manera solo suponen riesgo de incendios, plagas; ralentización del crecimiento de los sumideros forestales y de los productos madereros de alto valor añadido, según informa la asociación.
Apropellets ve con esperanzas la próxima temporada 2022-2023, "con un crecimiento de la demanda, por el aumento en el parque de estufas y calderas y la competitividad en precio frente a otras soluciones más caras e insostenibles; pero para ello es necesario que las diferentes Administraciones estén a la altura y permitan disponer de madera suficiente para evitar posibles roturas de suministro".
fuente foro industria y energía